jueves, 28 de diciembre de 2017

“La Malquerida” Ley de Seguridad Interior…

Miguel Angel Gaytán Montes, 27 de diciembre de 2017.


Hace un año, para ser exactos, el 27 de diciembre de 2016, publiqué un artículo en el que manifesté mi punto de vista sobre la solicitud que hizo, el Secretario de la Defensa, el Gral. Salvador Cienfuegos Zepeda, a los Senadores de los grupos parlamentarios del PRI y PVEM, el 7 de noviembre de 2016, para que se legislara con el objetivo de contar con los instrumentos legales, cito: ”… que sustenten nuestra actuación en las actividades de apoyo a la seguridad pública… ”

En aquella ocasión, manifesté mi desacuerdo en que se legislara en ese sentido, por varias razones;

Primera; Las actividades de resguardo de la “seguridad interior”, como ahora le llaman a aquello que hay que proteger de las amenazas, generadas por los propios ciudadanos mexicanos, desde el propio territorio nacional, son facultad de las autoridades civiles nacionales, es decir de las policías de los diferentes niveles de gobierno.

Segunda; Las experiencias históricas de la participación de las fuerzas armadas en actividades de “recuperación de la paz” social, que se han presentado en muchos países, son nefastas y han tenido como resultado, violencia, represión, muerte y un largo etcétera de tristes consecuencias.

Tercera; Porque en el erario nacional, se tienen los recursos necesarios para “invertir” en la construcción de cuerpos policiacos civiles, confiables, honestos, comprometidos, bien remunerados y eficientes en las labores de combate al crimen y preservación de la paz social.

Cuarta; Porque, legislar en términos de lo solicitado por el General Secretario de la Defensa, significa legitimar el uso por parte del Poder Ejecutivo Federal, de las fuerzas armadas.

Quinta; Porque son ya mas de 10 años realizando estas actividades de “resguardo de la seguridad interior”, por parte de las fuerzas armadas, y los índices delictivos no han disminuido, ni nos sentimos mas seguros en las calles, de modo que no encuentro razón para legitimar el uso de un recurso que ha demostrado no ser efectivo.

Hoy sigo pensando exactamente lo mismo que hace doce meses, pero adicionalmente les manifiesto mi desconcierto al ver que gran cantidad de ONG’s, artistas famosos y no famosos, opinadores de todas las extremas y en todas las redes, chairos y no chairos, se manifestaron presionando a los Senadores de la República para que no aprobaran la “Ley de Seguridad Interior”.

En esto de manifestarse y protestar ante los legisladores, estamos como cuando los sismos, no ayudamos a nuestros semejantes, ¡hasta que ya no hay mas remedio!

¿Porque toda esta gente que se dice indignada por la promulgación de la ley que comento, no se manifestaron hace un año?, ¿por qué hasta que el remedio será, remandar la ley o derogarla?

Cualquier acción o manifestación en prevención, es inexistente en nuestro país, nadie se preocupa ¡hasta que se ahoga el niño!.

Deberíamos protestar contra nuestros representantes, los Diputados y Senadores, porque de hecho, ¡no nos representan!.

Ellos representan a sus “bancadas”, es decir a sus intereses partidarios, intereses políticos, económicos y personales.

Para ellos, ¡el bien público puede esperar!

Exigirle a los Gobernadores, Presidentes Municipales, o la PGR, que hagan su trabajo, ¡puede esperar!

El problema no es si la ley dice o no dice o si es clara o no es clara, si tiene candados o no los tiene, para mi, el punto es que;

Las fuerzas armadas, no deben involucrarse en actividades de seguridad interior, ¡PUNTO!.

Ese es el tema “primigenio” de este asunto, no nos perdamos en la letra escrita en la Promulgada Ley, estamos cayendo en el juego perverso de la “oligarquía partidaria”, de ¡discutir si la ley dice, que si no dice!

Vecinos, lo que debemos hacer es buscar alguna manera de exigir a nuestro representante, el Diputado Local y el Federal, que realmente solicite la opinión de los ciudadanos antes de “levantar la mano” o apretar el botón de votar leyes.

También debemos exigir al Presidente Municipal y al Gobernador, que hagan su trabajo y no intenten transferir a otros la responsabilidad de actuar contra el crimen organizado.

No debemos olvidar que aparejado al flagelo de la VIOLENCIA y el CRIMEN, se encuentra un grave mal que si depende de las autoridades, la IMPUNIDAD, este es el alimento de los grupos criminales y de los individuos criminales.

Crimen e impunidad hacen una suerte de círculo vicioso que se manifiesta en una espiral ascendente en donde las autoridades, no han tenido el menor interés de terminar con ellas.

¿Cuanto tiempo mas pasará, antes de que haya un real estado democrático, en el querido México que construimos día a día?

¿Qué estaremos dispuestos a sacrificar, como ciudadanos inconformes, para disfrutar de paz y tranquilidad en las calles, en los barrios?, ¿hasta donde tendrán que llegar las protestas?, ¿quién encabezaría los movimientos auténticos de resistencia civil?


Esta es, Vecino, la gran tarea que tenemos pendiente…


Referencias:

El discurso completo del General Secretario de la Defensa Nacional lo encuentras en:

El Artículo del Vecino Liberal del 27 de diciembre de 2016 lo encuentras en:

jueves, 21 de diciembre de 2017

La Comunicación Rural, “Los pueblos olvidados”

Miguel Angel Gaytán Montes, 21 de diciembre de 2017.


Las cuentas alegres del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFETEL), excluyen de sus planes, la atención de las zonas rurales, donde los ciudadanos se encuentran marginados, por los gobiernos Federales, Estatales y Locales.

En un artículo publicado en el portal de internet de “El Financiero”, el pasado 17 de diciembre de 2017, se publicó un artículo denominado “Ellos ofrecen telefonía celular a 40 pesos y deberán pagar 1 mdp al año para “sobrevivir”, cuya autora es Itzel Castañares.

La compañía a la que hace referencia el artículo es “Telecomunicaciones Indígenas Comunitarias” (TIC), la cual atiende 18 comunidades del estado de Oaxaca y el próximo 2018, atenderá el estado de Guerrero.
El cobro por el servicio de telefonía móvil es de $40.00, por línea. De los cuales, $25.00 se quedan en la comunidad y 15 se van a la compañía TIC.

Actualmente está en problemas financieros, debido a que el IFETEL, le requiere de un pago de 1 millón de pesos anuales, mismos que, por razones obvias, no está en posibilidades de cubrir.
Lo anterior pone en riesgo de desaparecer a esta compañía que mas que fines de lucro, tiene el objetivo de acercar a las zonas mas desprotegidas, la posibilidad de comunicarse de manera expedita, vía la telefonía móvil.

Tal parece que tanto el IFETEL, como el Gobierno Federal, no tienen el menor interés de proveer a las poblaciones rurales, de este vital servicio.

Ninguna de las compañías de telefonía fija o celular que actualmente operan en nuestro país, tiene el interés de cubrir estas zonas marginadas, pues estas son consideradas “no-rentables”.

Lejos están los años en que, al privatizarse TELMEX (agosto de 1990), le impusieron la obligación de atender las poblaciones rurales, bajo las siguientes premisas;

·      Poblaciones de +500 hab.; deberían atenderse antes del 31 de diciembre de 1994.
·      Poblaciones de <2,500 hab.; deberían proporcionar servicio vía conmutador.
·      Poblaciones de +2,500 hab.; deberían proporcionar servicio automático, a partir de enero de 1995.
·      Deberían atender “Todas” las poblaciones rurales, en las que se pudiera recuperar, al menos el 75% de los costos de instalación y mantenimiento.

El Gobierno Federal, encabezado por el presidente Carlos Salinas de Gortari, aseguró con estas condicionantes, que la empresa de Carlos Slim, no se volcara de manera exclusiva en los mercados mas rentables, y aseguró la atención de las zonas que, hasta ese momento, no tenían la menor esperanza de verse favorecidas con el servicio telefónico, a cargo de la empresa paraestatal, cuyas características principales eran, la lentitud, la ineficiencia y la mínima inversión en tecnologías de punta y menos en esas zonas.

Pues si, muy lejos están aquellos días.

Hoy las compañías de telecomunicaciones que operan en nuestro país, no tienen ninguna condicionante, en relación a la prestación de servicios en zonas rurales.

Solo han invertido en cobertura en las zonas altamente pobladas y con perspectivas de recuperación rápida de sus inversiones, para colmo, hay empresas, de fama internacional como ATT, que lo único que tuvo que hacer fue “comprar” algunas compañías ya operando, para lograr presencia y “explotar” las capacidades de la cobertura recién adquirida. El IFETEL, manifiesta con orgullo en su informe del 1er trimestre de 2016 en el capítulo1.5, cito:

En los últimos cinco años los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión han registrado flujos importantes de la inversión extranjera directa (IED).

Las cifras son las siguientes:

En 2014 ATT vendió a América Móvil su participación accionaria por $4,157 millones de dólares. Pero En el citado informe, el IFETEL, manifiesta que hubo una salida de Inversión Extranjera Directa por  la cantidad mencionada. En realidad esta inversión nunca salió de México, pues quien la pagó fue América Móvil, es decir, se quedó en nuestro país.
También en este informe del IFETEL, en el mismo capítulo, hace referencia de que en el 2015, cito;

“ … en el 2015 se observó una entrada de capital de $2,575 millones de dólares estadounidenses derivada de la compra de Iusacell y Nextel que realizó ATT

Nuevamente se equivoca el IFETEL, pues solo cambió de manos la infraestructura de Iusacel y Nextel. Es decir que hasta ese momento, ATT no había instalado ni un metro mas de cables en nuestro país. Y sin embargo el IFETEL, manifiesta en su informe, que en los últimos años los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión han registrado flujos importantes de Inversión Extranjera Directa.

Este es solo un ejemplo de una de las compañías mas importantes del mundo que actualmente están operando en México, pero que no harán nada por atender las necesidades de comunicación de las zonas rurales, si el Gobierno Federal o el IFETEL no se los exige.

No es que extrañe el viejo México del monopolio, pero las necesidades de telecomunicación de la sociedad, la economía y las zonas rurales, aunque han cambiado, siguen presentes y creciendo en las zonas rurales.

Si el IFETEL no tiene la visión, ni el compromiso de atender las necesidades de comunicación de las zonas menos favorecidas, y por lo tanto no le requiere a los diversos operadores de telecomunicaciones, que atiendan esta necesidad, entonces no deberían exigir pagos de derechos, a una compañía que prácticamente opera en cero ganancias, pero satisface una necesidad que en los tiempos actuales es básica.


Usted vecino, ¿cómo la ve?...


REFERENCIAS:

Portal internet de “El Financiero”

IFETEL;  Primer informe trimestral estadístico 2016