jueves, 7 de octubre de 2021

¡La Democracia NO es la Culpable!


La definición "universalmente aceptada" de Democracia es:

Sistema político que defiende la soberanía del pueblo y el derecho del pueblo a elegir y controlar a sus gobernantes.

Sin embargo mi definición de Democracia es:

Eso que apareció en México, aunque los ciudadanos nunca la hayan invocado.


Gracias a nuestra Democracia tenemos los gobiernos que hemos tenido en los últimos 22 años.

Pero la Democracia no es culpable de los resultados que han tenido los gobiernos que elegimos.

La Democracia es un tesoro que nos permite decidir, elegir, fiscalizar y tomar determinaciones, respecto de nuestros gobernantes, sus acciones, resultados y consecuencias de los mismos.

El problema de la Democracia mexicana, no es ella en sí misma, somos nosotros, los ciudadanos. Eso que algunos llaman "Pueblo", por cierto, éste es un mote que permite a los ciudadanos, esquivar la responsabilidad ó culpabilidad, por la orientación de su voto y sus consecuencias.

La Democracia supone la participación de los ciudadanos de manera informada, consciente, responsable, con visión de futuro, no de pasado.

Pero más allá de nuestra mediocre ciudadanía, sucede que nuestra Democracia nació y se desarrolló sin que los ciudadanos la pidiéramos.

La cristalización de nuestro sistema político Democrático, llegó sin darnos cuenta. Llegó sin guerras ni sobresaltos perceptibles para los vecinos. No sucedió, como en muchos países, en los que fue necesario entablar revoluciones, con la consecuente pérdida de vidas y bienes.

¡La Democracia mexicana, no fue necesario conquistarla!

¡Por eso es tan difícil valorarla y atesorarla!

La Democracia mexicana fue el resultado del esfuerzo y la lucha de los grupos políticos disidentes al Gobierno  hegemónico del PRI. Partido que se apropió de los  frutos de la revolución iniciada en 1910 y concluida en 1921.

La Democracia mexicana fue resultado de las pugnas y manifestaciones de las disidencias políticas, no de un reclamo popular.

El momento decisivo del inicio del fin de la hegemonía del PRI, se presentó en la elección presidencial de 1988, en la que el triunfo de Carlos Salinas de Gortari, se vio envuelto en un mar de dudas en cuanto a la legalidad del proceso electoral. Generando las protestas de quienes apoyaban al candidato del Frente Democrático Nacional, el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas.

Las evidentes anomalías del proceso, originaron la unión de las tres facciones más fuertes de la oposición, el Partido Acción Nacional, el Frente Democrático Nacional y el Partido Revolucionario de los Trabajadores. Ellos fueron los que consolidaron las protestas ante las graves anomalías presentadas en la Comisión Federal Electoral  dirigida por el Lic. Manuel Bartlett, Secretario de Gobernación. Presionando de esa manera al Gobierno del Presidente Salinas a convocar a una reforma electoral, en los primeros días de su mandato.

Si bien a partir de 1988 y hasta 1994 se dieron cambios importantes en la legislación electoral, fue hasta las elecciones intermedias de 1997, cuando la hegemonía del PRI desapareció al perder la mayoría en el Congreso de la Unión.

Podría decirse que éste momento, fue muy significativo debido a que fueron las primeras elecciones organizadas por el Instituto Federal Electoral, con directiva estrictamente ciudadana y con autonomía del Poder Ejecutivo.

A partir de éstas elecciones, apareció en nuestro país una figura que la "masa de ciudadanos" nunca pedimos que se hiciera presente: ¡LA DEMOCRACIA!

Con la base de un IFE ciudadano y una Democracia incipiente, en los subsiguientes procesos electorales, al fin se terminaron más de 70 años de la Hegemonía del PRI en el poder, cuando en el año 2000 triunfó un candidato presidencial de un partido distinto al PRI.

Adicionalmente el Congreso de la Unión, mantuvo una característica importante, ningún partido ostentaba la mayoría absoluta, misma que los presidentes del PRI históricamente si disfrutaron.

Una Democracia vigente, dio también como resultado, que las fuerzas en el Congreso estuvieran equilibradas. Ya el Presidente no tenía seguro el apoyo del Congreso.

En resumen, los partidos políticos fueron quienes lucharon, para cristalizar el anhelo de que los procesos electorales fueran justos y además legales. Planteando las condiciones mínimas necesarias para la participación de todas las fuerzas políticas en igualdad de condiciones.

El proceso democratizador se llevó por 20 años, culminado en 1997.

En todos ésos años, los vecinos y los hijos de vecino no nos enteramos de todo lo que se manifestó, luchó y presionó al Gobierno del PRI, para que las cosas cambiaran, para que en nuestro país se practicara una Democracia real.

Es por eso que no valoramos la importancia del equilibrio de fuerzas en el Congreso, no nos importa el que hoy, haya un partido que ejerce el poder hegemónico, y peor aún, que todo ése poder le sea entregado a los ideales de un sólo hombre, el actual Presidente de la República.

La Democracia no es la culpable de los resultados que los gobiernos obtienen.

Los culpables de que la Democracia nos lleve a destinos indeseables, ¡es nuestra incompetencia como ciudadanos! ¡Nuestra irresponsabilidad!

Hasta hoy México es un país de libertades, estructurado con instituciones creadas en la búsqueda de un futuro mejor.

México y sus instituciones no son perfectas, porque son resultado de los hechos de nosotros, humanos que cometemos errores.

En el marco de las instituciones y las leyes , tenemos los ciudadanos la posibilidad, pero también la obligación, de participar en dar forma al país que queremos.

Tenemos la obligación de actuar a favor de México, no de intereses de personas ó grupos.

Vecino, si esperas a que alguien venga a cambiar las cosas en nuestro país, corres el riesgo de que los cambios no sean favorables para ti ó tu familia, tu vecindario, tu ciudad y claro tu país.

Nadie lo hará por ti, ni el mas iluminado político tiene la posibilidad de lograr un cambio, por pequeño que éste sea, sin la participación comprometida de todos los ciudadanos.

¡No culpes a la Democracia de los malos gobiernos que hemos padecido y padecemos!

La grandeza de un país se mide, por la suma de la grandeza de cada uno de sus ciudadanos.


REFERENCIAS:

1)    "Hacia la democracia mexicana". Blog "El Vecino".

2)    "Despreciada y Golpeada". Blog "El Vecino".