Miguel Angel Gaytán Montes, 21
de junio de 2017.
Mas allá del balance de votos entre
candidatos, o partidos, hay otros efectos, quizás mas dañinos para la débil
democracia mexicana, que los recientes procesos electorales han dejado como
resultado.
Veamos el recuento de los daños…
Muchos hablan de fraude y el árbitro de
los comicios, el INE, está siendo crucificado por partidos políticos y lo que
es peor, por un amplio sector de la sociedad, por no decir que toda la
sociedad.
Pero, esas expresiones que dan mala
calificación a los procesos tienen como fuente principal a los partidos
políticos. Principalmente, los partidos políticos no ganadores, y se quejan
porque de esa manera le presentan a la sociedad la razón de su derrota… ¡el
fraude!.
Saben que a los mexicanos, se nos
facilita pensar y aceptar que las cosas en los procesos electorales apestan y los
poderosos se confabulan en contra de los partidos menores. De esa manera,
lograrán conservar el apoyo de sus seguidores. Igual que en los partidos de fútbol en los
mundiales, el público internacional apoya al país que parece débil, aunque no
sepan ni el nombre del país al que apoyan.
La Sociedad mexicana, es otra fuente de
reprobación de los comicios, y esta calificación tiene su origen, en la
tendencia del mexicano a pensar que en la política, como dije antes, todo está
podrido y para reforzar este pensamiento, los propios representantes de
partidos, no se cansan de vociferar a los cuatro vientos ¡FRAUDE!. Y como los
mexicanos tenemos poca información real de lo que sucede, legal y realmente en
estos procesos, pues nos resignamos a creer lo que se dice en los noticieros,
sin mas cuestionamiento o análisis.
Yo no coincido con esas afirmaciones,
primero porque, si aceptamos que todo está podrido, no dejamos camino
alternativo a la democracia, porque entonces, si queremos cambiar las cosas, tendríamos
que pensar en opciones no pacíficas o no institucionales para cambiar el estado
de cosas de nuestro país.
Y yo definitivamente, no estoy de acuerdo
en esos pensamientos y expresiones que, mas que catastróficos, son
irresponsables.
Los partidos políticos están haciendo que
la sociedad pierda el ánimo, y se distraiga y entonces espere que alguien
rescate la democracia, dejando en manos de los políticos, “esa difícil tarea”.
Porque, además, es mas fácil descansar en “otros” la responsabilidad de hacer
algo, y de esa manera eludir mi
responsabilidad y compromiso.
Mi
Recuento de los daños es;
Líneas arriba dije… “mas allá del balance
de votos”…
Yo divido los procesos electorales en tres
partes;
-
El tiempo previo al día de la votación
-
El tiempo a partir del día de la votación
-
El tiempo posterior al recuento “Distrital” de votos
El
tiempo previo al día de la votación, los partidos
políticos lo utilizan para prometernos, coquetearnos, enamorarnos ó
conquistarnos. Otros para coaccionarnos, condicionarnos, engañarnos y hasta
amenazarnos, en todo caso, con el único objetivo de obtener el voto ciudadano,
que les permita acceder al poder. ¡Pero solo eso!, porque si los ciudadanos esperamos
que cumplan sus promesas, ofertas, o palabras de amor, pecaremos de ingenuos,
pues todos hemos podido comprobar, que una vez en el poder, o nos olvidan o nos
ignoran o nos vomitan.
El
tiempo a partir del día de la votación. Les debo
recordar que “El Voto”, es el único
derecho emanado de las leyes electorales, que los propios políticos promueven y
desgraciadamente hasta ahora es de lo poco que directamente podemos hacer para
darle rumbo a los destinos de nuestro país.
El voto se emite por cada ciudadano y es
contado por ciudadanos, en presencia de representantes de los partidos políticos.
Las actas del resultado del recuento de votos de cada casilla son firmadas por
los funcionarios de casilla y los representantes presentes.
Los resultados de la elección están en
cada acta y el miércoles siguiente al día de la votación, se realiza una
reunión con todos los representantes en la que se coteja cada acta y se define
si será contabilizada “tal cual” o si hay tantas inconsistencias, que amerita hacer
un recuento voto por voto de la casilla correspondiente, y entonces proceder a
realizar el cómputo final de los votos, que resultará en el pronunciamiento del
INE del candidato que fue favorecido con la mayoría de votos.
El
tiempo posterior al recuento Distrital de votos,
es el tiempo en el que los candidatos y partidos tienen la posibilidad de
denunciar ante el Tribunal Federal Electoral (TRIFE), todas aquellas anomalías
que hayan sido detectadas durante el proceso electoral y de las cuales se
cuente con pruebas para que una vez consideradas por el TRIFE, este determine
lo que deba proceder. Se puede reevaluar el balance de votos y modificar el
resultado en base a los datos resultantes. Incluso podría resultar el veredicto
de anular las votaciones y ordenar la repetición de elecciones.
Desde mi punto de vista, donde
normalmente se ubica el fraude es, en “El
tiempo previo al día de la votación”, en las formas que ya les mencioné en
líneas arriba, pues si hubiera
irregularidades en “El tiempo a partir
del día de la votación“, los partidos tienen en su poder una copia del acta
de cada casilla, por lo que esta sería la prueba fidedigna del resultado
obtenido y no podrían modificarse “fraudulentamente” los resultados, evitando
cualquier tipo de fraude.
Es responsabilidad de cada partido
político, ubicar en cada casilla un representante, ya que esta será la manera
de poseer pruebas de los resultados reales de las votaciones “voto por voto y casilla por casilla”.
Aún cuando los paquetes electorales fueran violados o robados, si los partidos
tienen sus actas, con ellas se podría realizar el cómputo y sería absolutamente
válido. Pero como hay muchos partidos que no se ocupan de colocar
representantes en cada casilla, entonces eligen el camino de la protesta y el
argumento de “FRAUDE”.
No seamos parte del mundo corrupto que
habitan los malos políticos que pululan en nuestro país, debemos estar atentos
y no dejarnos engañar.
Los votos cuentan y son respetados. Si
hay fraude, este se concreta mediante los políticos, los partidos y los
gobiernos, Federal y Local. No por los ciudadanos que cuentan los votos ni por
el INE.
Creo que debemos exigirle mas a los
partidos políticos, exigirles que pongan representantes en cada casilla, que
bastante dinero se les da de nuestro presupuesto, para que operen y funcionen.
No debemos tolerar que se culpe al INE o
al TRIFE de los actos irresponsables de los políticos, de los partidos ni de
los gobiernos.
Si rescatamos al INE y al TRIFE, aún
quedará la oportunidad para que los ciudadanos exijamos que las instituciones
realicen sus funciones dentro de la ley y la DEMOCRACIA sea real y fuerte y esta
sea la manera en que el sistema político mexicano opere hoy, mañana y siempre.
Por si acaso, les comparto la definición
de DEMOCRACIA:
“Sistema político que
defiende la soberanía del pueblo y el derecho del pueblo a elegir y controlar a
sus gobernantes”