Miguel Angel
Gaytán Montes, 27 de diciembre de 2016
¡A todos los que viven y aman el fútbol! … les ofrezco una
disculpa por lo que voy a decir sobre este deporte que se practica mayoritaria
y popularmente en México…
Este año, como todos sabemos, se realizaron los Juegos Olímpicos
en Río de Janeiro, Brasil, y habiendo disfrutado de varias de las competencias
en diferentes disciplinas, tuve una revelación, un rayo de luz que iluminó mi
oscuro seso.
Precisamente en esos instantes en que me pude percatar de la dedicación, intensidad, lealtad, entrega y determinación con la que los atletas participantes en los juegos, afrontan la alta responsabilidad de competir representando una disciplina y un país, ¡ante los ojos del mundo!
Precisamente en esos instantes en que me pude percatar de la dedicación, intensidad, lealtad, entrega y determinación con la que los atletas participantes en los juegos, afrontan la alta responsabilidad de competir representando una disciplina y un país, ¡ante los ojos del mundo!
... En esos momentos pensé en el fútbol de primera división que se juega en nuestro país y les confieso que me sentí desagusto conmigo mismo, por seguir los partidos semanalmente, pero también por toda la corrupción, engaño, institucionalización del fraude, manipulación mediática, el poder del dinero, la eterna y frustrada esperanza verde, entre otras afecciones, que padece nuestro ¡“juego del hombre”!
Perdón raza futbolera, ¡Quien esté libre de pecado que tire la
primera piedra!... denme la oportunidad de explicar el porque opino así de
nuestro fútbol y darles sólo algunos botones de muestra, a saber;
Corrupción; ¿les suena el término “Pacto de Caballeros”, el cual impide que
los jugadores puedan contratarse con el equipo que mas le convenga, poniendo el
control de las contrataciones exclusivamente en manos de los directivos de los
equipos?, ¿O el tristemente famoso grito multitudinario “eeeeeeeeeeeeeeeee
¡PUTO! que la Federación de Fútbol ha tolerado y hasta alentado, prefiriendo pagar
las multas que la FIFA le cobrará como multa por este grito non-grato para la
comunidad futbolística internacional? ¡Han fomentado la corrupción de las
juventudes, al mostrar como actitudes válidas, la denostación del contrario, la
violencia y el descrédito deportivo del vencedor o del vencido, según el bando
en que nos encontremos!
Engaño; ¿Les suena el manejo de la definición de los árbitros para los
encuentros “por medio de una computadora”, la cual nadie sabe quien maneja,
cuales son los parámetros que involucra ni quien es el responsable de su
custodia? pero el resultado es que el desempeño de los árbitros siempre deja
muchas dudas sobre su honestidad. O acaso ¿recuerdan alguna jugada por la que
un jugador se retuerce de dolor cuando el contrario ni siquiera lo tocó?
Institucionalización del
Fraude; ¿Recuerdan la “multipropiedad”, esa que
permite que un solo dueño “posea” mas de un equipo de fútbol, participando en
la misma liga?, se pusieron reglas para terminar con este flagelo, pero nadie
ha hecho nada por cumplir el objetivo final de que no existan
multipropietarios.
Manipulación Mediática; ¿Alguien recuerda la expresión, “tenemos la mejor selección de
la historia” y somos eliminados del mundial en el 4º partido, como siempre?
Poder del Dinero; ¿Acaso no es suficientemente notorio que quien tiene el poder de
decir y mandar en el fútbol mexicano es quien tiene mas dinero?... ahí tienen a
personajes como “los Azcárraga y los Salinas”, adueñándose de la marca
“Selección Nacional Mexicana”.
Pero lo que menos me inspira a ver partidos de fútbol mexicano, es
la actitud de los jugadores; Observa si pelean cada balón en cualquier rincón
de la cancha, observa si intentan terminar una jugada antes de dejarse caer al
menor contacto con el adversario, o si los entrenadores culpan al pobre
desempeño de los árbitros si pierden un partido. ¿O acaso no has sabido de
jugadores que disfrutan de trasnochar y beber y consumir quien sabe cuantas
sustancias, afectando directamente su rendimiento en la cancha?
Todo lo mencionado afecta el espectáculo, afecta la excelencia
deportiva, afecta a nuestra niñez y juventud, tergiversa los objetivos de
practicar deporte.
Bueno, pues por esas cosas y muchas otras mas, desde los juegos
olímpicos de Río, decidí no volver a ver un juego de fútbol mexicano.
Se que no me extrañarán, se que no lo extrañaré, pero espero que
algún día nuestro fútbol, sea una digna representación de la CULTURA de los
mexicanos. Pues según la Real Academia de la Lengua Española, “CULTURA es el
conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo
artístico, científico, industrial, en una época o grupo social.”
Y estoy convencido que lo que se manifiesta en nuestro fútbol,
dista mucho de ser un fenómeno deseable y digno de representarnos como
expresión de la cultura mexicana… ¡a menos que así de mal estén las cosas en
nuestro país!
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