Miguel Angel Gaytán Montes, 12 de marzo de 2021.
Nuestra actual democracia es el fruto de un período en el cual se realizaron 6 reformas a las Leyes Electorales mexicanas, periodo que duró 20 años, de 1977 a 1997, culminando en el momento en que el IFE dejó de estar bajo el control del Presidente de la República (1).
Gracias a los acuerdos y reformas que alcanzaron las diversas fuerzas políticas lideradas por el PRI, PAN y PRD en dichas Leyes Electorales.
A partir de ése IFE ciudadano, se ha continuado con la evolución de las leyes electorales, buscando que el piso sea parejo para todos los candidatos y partidos que participan en la Política Nacional.
A la luz de los resultados electorales de los últimos 24 años, puedo decir que aquellos cambios y los que le han seguido a la Legislación Electoral, han sido muy satisfactorios. Me explico...
Desde 1929 hasta antes de las elecciones de 1997, 68 años, el PRI mantuvo la mayoría en el Congreso de la Unión. Pero a partir de las elecciones de 1997, primeras celebradas con un IFE encabezado por ciudadanos, ya no hubo mayoría de ningún partido político en el Congreso, hasta las elecciones del 2018.
Pero no sólo eso, de 2000 a 2018 se celebraron 4 elecciones presidenciales y en 3 de ellas se han presentado cambios de partido ganador.
A nivel Estatal y Municipal, el cambio de partido en el poder, ya es algo que se presenta con mucha frecuencia. Y que decir de las elecciones de los Diputados Locales, también los Congresos Locales presentan un gran equilibrio de fuerzas, es decir sin el dominio absoluto del partido en el poder.
Según opinión de José Woldenberg (2), nuestra democracia es poco valorada, debido a que, la democratización de las Leyes Electorales, que les he mencionado, fue provocada por los partidos de oposición y por movimientos sociales, algunos de ellos violentos, los cuales obligaron al partido en el poder, el PRI, a promover una evolución en las reglas del "juego electoral", que diera cause a las justas demandas de los opositores.
Este proceso de redefinición de las reglas del juego político electoral, se dio en medio de un ambiente de "supuesta" democracia (3). Pues, si bien se realizaban elecciones abiertas para definir a los gobernantes, las reglas del juego y el árbitro, estaban controlados por el Poder Ejecutivo, es decir el Presidente de la República y su partido el PRI.
La transición referida y realizada entre 1977 y 1997 fue relativamente pacífica, la sociedad no tuvo necesidad de tomar las armas ni fue producto de un golpe de estado. De manera que los ciudadanos nunca nos dimos cuenta de los beneficios que consiguieron todos aquellos que con su inconformidad y beligerancia, obligaron a los Gobiernos de 4 sexenios a ceder parte del poder y control político.
Los partidos se han llenado la boca hablando mal del árbitro que es el IFE, hoy INE. Han intentado justificar sus derrotas electorales, con el desprestigio del mayor garante del respeto de nuestro voto, el INE.
Éste hecho ha demeritado y hasta denigrado las virtudes de nuestra Legislación Electoral, en aras de fines perversos y convenientes a los intereses personales ó de grupos políticos.
Con base en las declaraciones de José Woldenberg(2), hice un resumen de las diferencias entre el ayer y el hoy de la vida política de nuestro país el cuál les comparto...
Es importante que cuidemos nuestra DEMOCRACIA, es muy joven aún y tenemos que hacerla madurar, pues no hay nada hecho por el humano que sea perfecto.
Dígame usted Vecino, ¿estaba consciente de lo que sí tenemos en la actualidad? ¡Un INE ciudadano que protege nuestro voto y por lo tanto nuestra voluntad soberana!
Mi estimado Vecino... ¿Usted que piensa?
REFERENCIAS
1) "Hacia la Democracia Mexicana", Blog "El Vecino" abril 2020.
2) Orígenes de nuestra Democracia con José Woldenberg, Revista de la Universidad
3) Vargas Llosa: "México es la Dictadura Perfecta", Diario "El País" 1990.