Miguel Angel Gaytán Montes, 2 de abril de 2020.
El tiempo se detuvo,
este día retrasó su llegada.
Mis horas no fueron las tuyas…
volvió a ser martes.
Abrazaba las sombras de la noche
y saboreaba los besos mas ardientes
que entre sueños te prendaba.
El viento de estos días
me ha esparcido por los rincones…
hoy no has venido…
ha vuelto a ser martes.
Hoy me recuerdo
cuando te hacía la corte,
las personas se veían diferentes
parecía que el país había sido invadido
por extranjeros felices.
El canto de mi guitarra clama desesperado,
te busco entre las notas de la canción que te recuerda.
Mis silencios acaban por quitarme la calma,
cuando descubro la soledad, angustiosa…
Se abre ante mi la presencia de una musa,
forma casi humana tan perfecta que no lo parece.
Aunque siempre has tenido
un par de manos, de ojos…
y todo lo demás que se cuenta por pares,
además de la ternura que emanas
de las plantas de los pies
hasta el rizo mas lejano a tu cabeza.
Estoy absorto,
entre tus manos,
y no se hasta cuando…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario